La opinión pública sabe que a un canal se le negó la concesión para crear otro con el fin de enseñar un rostro nuevo de la televisión venezolana. Fue exactamente un 27 de mayo hace ocho años cuando esa idea, vestida de contracultural, se materializó en la Televisora venezolana social, (TVES ) aunque desde el 2014, lo que fue un concepto llamado revolucionario que se diferenciaba de su antecesor, Radio Caracas Televisión, (RCTV), desaparece paulatinamente.
El nuevo presidente, Winston Vallenilla, inició una oleada de programas al mejor estilo de RCTV. La estética visual y discursiva cambiaron radicalmente el antiguo TVES. Transmisiones de la Copa Mundial de fútbol y programas llamados Está Pegao!, Te ves en la mañana, El Encantador de perros, o telenovelas de corte internacional como Porque el amor manda, han generado críticas para espectadores fieles a lo que se hizo desde un momento: televisión revolucionaria.
Pareciera que viera Rctv. Winston Vallenilla es solo un monigote. El rating parece ser más poderoso que el sueño revolucionario, opinó Antonio Aldazoro, estudiante de Comunicación Social, quien aplaudió lo que en un principio fuera un proyecto dedicado al arte y sobre todo de televisión alternativa.
Rating de la chatarra
Aldazoro no es único en opinar sobre el tema. El exdirector del Instituto de Investigaciones de la Comunicación (ININCO), Gustavo Hernández, lo ha analizado desde los inicios del canal. «TVES no cumple con el canon globalizado de un servicio público. Es lamentable que esto ocurra porque sabemos que hay mucha producción nacional independiente que pierde su sentido cultural y plural».
Hay que considerar que el rating no se pelea con la calidad de la programación; que el rating lo hayan utilizado los canales privados y el gobierno como comodín para difundir chatarra televisiva, es otra cosa, agregó Hernández.
A ocho años de la concesión, que no le fue renovada a RCTV, el canal gubernamental ha crecido económicamente. En la memoria y cuenta del Ministerio para la Comunicación e Información se resalta que Tves recibió durante el 2014 un monto de 568 millones 821 mil 528 bolívares. La empresa fue la más beneficiada del año pasado. El presupuesto aumentó un 420%. ¿La familia lo necesita?
Diosa Canales: Lo que faltaba
Al parecer sí. El pasado lunes la denominada artista, Diosa Canales, visitó las instalaciones del canal para presentarse en el programa TVES en la noche que casualmente se estrenó en esa ocasión. Esto abre el debate a seguidores de un modelo comunicacional revolucionario y el tradicional. «¿Qué más se necesita para saber que Winston Vallenilla fue seducido por la transculturización»?, expresó Aldazoro.
El profesor de estudios políticos e internacionales en la UCV, Jesús Silva R, publicó un artículo de opinión en Aporrea, allí contrasta los comentarios de detractores de la gestión de Vallenilla tras la aparición de Diosa Canales. «Todas son respetables damas que se han convertido en celebridades de la farándula con cientos de miles o millones de seguidores en twitter (cada una) y su presencia acapara los medios de comunicación. La inmensa mayoría de los venezolanos hemos contemplado alguna vez a estos sex symbols, porque existe la sed natural de hacerlo o tal vez los medios de comunicación han hecho al pueblo sexualmente insaciable con su propaganda».
Silva argumentó que el erotismo no es una industria delictiva porque se enmarca en la libertad sexual de los individuos. «Nuestra sociedad constantemente. Todo parece enmarcarse en la legalidad y el derecho de cada adulto a experimentar vivencias y desenvolver su personalidad«.
Opiniones son muchas. La realidad es una: TVES es el producto de la competencia televisa que se viste con discursos chatarras que, en capitalismo, son atractivos para el raiting. El público revolucionario, sobre todo el amante del arte, se pregunta qué fue de las semanas de Hitchcock, Woody Allen, o del cine francés y venezolano, comentó Denisse Gonzales, usuaria en Facebook en una publicación de la página Trinchera Creativa donde los diseñadores se encargaron de ilustrar satíricamente, lo que se ha convertido el canal de «la familia»: en el Caballo de Troves.
infelipe.wordpress.com 
Es lamentable que sirva para esto, debería de ser una escuela para Hacer Televisión, para la Universidad Bolivariana de Venezuela como aula de clases y otras escuelas que se dediquen a esto…Es ahora un poco más de lo mismo…Falta que pasen «Sin tetas no hay paraíso y el Capo»
El problema es la banalidad en la que está cayendo ese canal, totalmente opuesto a los principios Revolucionarios de izquierda que quiere una nueva sociedad, honesta respetuosa solidaria. Los parámetros de la burguesía que utiliza esos medios es el egoísmo y el obtener beneficios pecuniarios a como de lugar (el rating) sobre todo con la banalidad que le gusta a los de poca inteligencia.
Resulta difícil comprender el término ‘transculturización’ en el contexto de tu artículo. ¿A qué se refiere? Cuando lo relacionas con la aparición de Diosa Canales en TVES, pareciera sugerir que ella no representa la cultura ‘nacional’. Ahora bien, lo contrastas con el cine francés o de Woody Allen. ¿Son esos representantes de una cultura nacional predetermiada?
Por supuesto que no. Algo así me preguntaron en unos de los comentarios. Me parece positiva la acotación porque alarga el debate y cuando eso sucede, una conversación es más fluida y transparente. Bien, la representación cultural de un sector -en este caso del arte- fue expuesto porque el público del antiguo TVES, era el bohemio y artístico. En ese caso la relación era público con público. Ahora, gracias a la gestión de Vallenilla ha cambiado la también denominada audiencia. Lo triste es que no se trata de esos roles, sino de comunidad, algo que realmente nos debe interesar.
Me tomo la libertad de meterme en la conversación. Creo que cuando el autor habla de Cultura y Transcultización se refiere a la cultura como echo político, como la idea de darle contenido de calidad artística al usuario y no contenido chatarra basado en la explotación del individuo (sexo, violencia y/o lo soez). Si bien siempre nos han dicho que la transculturización es la imposición de lo extranjero sobre lo nuestro, considero que en este caso es la imposición de la anticultura como modelo «cultural» (valga la redundancia) desarrollado por el capitalismo para dominar, contra un modelo artistico propio del ideología política que enmarca nuestro proceso político. El echo que el «Culo» mostrado en TVes sea el de nuestra coterranea Diosa Canales no lo hace menos transculturizador a que el mostrado sea el de Jeniffer Lopez; a contra parte que un «Film» mostrado en un ciclo sea de Woody Allen no lo hace menos propio a nuestros ideales a que se proyecte una película de Marcel Rasquin.
P.D: Estos debaten enriquecen…
Realmente es una vergüenza en lo que se ha convertido TVES. Es el vivo retrato de RCTV. Hubiese preferido que se lo a ellos porque al menos tenddejarantendriaasitificación de ser asi…. objetivo vender y no formar que es lo esperabamos de Tves . YO VOTO PORQUE BOTEN A WINSTON VALLENILLA
QUE LA OPINIÓN DE USTEDES SON UN ECT,,,YO VEO ESE CANAL..Y WISTON LE DA TRABAJO A LOS TALENTOS NACIONALES SIN IMPORTARLE COLOR..NOSOTROS LOS VENEZOLANOS NECESITAMOS ENTRETENIMIENTO …QUE APARECIÓ DIOSA CANALES ESTA DE MODA…SOY CHAVISTA PERO EXISTE COSAS QUE ME DECEPCIONA,,,,Y AGRADEZCO AL PRESIDENTE MADURO POR DARLE ESE CANAL A WISTON VALLENILLA…Y QUE VALORES..SI EL PAIS SE HUNDE EN LA DELINCUENCIA Y PROSTITUCIÓN…Y TODO LOS PRECIOS ALTOS….SOY POBRE….NI PUEDO COMPRAR UNA LAVADORA…NI UN AIRE,,,NI ZAPATOS,,NADA….VOLVIMOS A LOS AÑOS 70 QUE SOLO LOS RICOS TENÍAN DERECHO A COMPRAR…CON LA DIFERENCIA DE LAS COLAS….
Faltan muchos canales educativos, se hace necesario un canal venezolano que realice entrevistas con especialistas en salud, medicina diferentes especialistas,psicología, sexualidad (educac.sexual), documentales que abarque al caribe y américa del sur, sus costumbres, cultura, turismo,gastronomía. Tanto que hay que enseñar y lamentablemente nos arropa el sistema decadente de la tv convencional.
Saludos. Aclaro, primero que nada, que el canal TVES me parece insufrible, y la locución de Winston Vallenilla me parece de lo más risible. Nunca me ha gustado la televisión comercial de este país, dirigida a un público masa, el cual se supone antes era salsero y merenguero y hoy en día es reggetonero, además de gustar de las televonelas cursis y el amarillismo. Aclarado este punto, aclaro también que no soy socialista ni simpatizante de este gobierno. Ahora diré unos cuantos puntos 1) ¿Ahora es que te vienes a dar cuenta de las inconsistencias de éste gobierno? en el 2007 le quitaron la concesión a RCTV, pero otro canal que según tu criterio podría ser hasta peor sigue en el aire, y lo seguirá estando mientras no se meta con el gobierno…imagino que sabes de que hablo: Venevisión. Sin ser «anti-capitalista» considero que gente como Gustavo Cisneros encarna, precisamente, al típico «cerdo capitalista», al empresario inescrupuloso que quizás no roba, pero puede vendernos cualquier cosa… pero no importa, decidió no meterse más con el gobierno para conservar su negocio y eso le resultó. Pasó en la época de Chávez, no es culpa de Maduro 2) ¿Que tan basura era la programación de RCTV? porque si bien, tenían programas muy banales de clara orientación comercial, también hicieron unitarios de carácter histórico, basados incluso en textos literarios de autores como Uslar Pietri y Rómulo Gallegos, sin mencionar series documentales como Expedición. Eso se hizo, mientras Venevisión nos mostraba las maravillas de Disney World en el Club de Los Tigritos 3) Pero ya va ¿acaso los medios de comunicación sólo existen para «educar»?¿cuál es el tabú con el tema del entretenimiento? si decido escuchar un buen disco de rock progresivo o ver una película clásica lo hago, ante todo, porque me gusta…no para que me eduquen no presumir de lo erudito que soy. La izquierda siempre cae en lo mismo: habla pestes de la cultura de masas, pero la cultura de masas es la que le gusta a las mayorías, al pueblo. Cosas tan respetables como el jazz fueron destruidas conceptualmente por gente como Teodor Adorno 4) ¿Había necesidad de eliminar un canal privado para hacer un canal de televisión alternativa? ¿No basta con que el Estado utilice otra señal del espectro radioeléctrico, muestre otra forma de hacer televisión y la misma audiencia termine eligiendo lo que le parece mejor?…todo eso sin mencionar que el viejo modelo basado en esquemas de concesiones es obsoleto, excluyente, hace que el Estado, y no el pueblo, tenga la última palabra. Investiga sobre la liberación del espectro radioeléctrico en Guatemala. Eso si es incluyente de verdad. Saludos
Por supuesto que no. Algo así me preguntaron en unos de los comentarios. Me parece positiva la acotación porque alarga el debate y cuando eso sucede, una conversación es más fluida y transparente. Bien, la representación cultural de un sector -en este caso del arte- fue expuesto porque el público del antiguo TVES, era el bohemio y artístico. En ese caso la relación era público con público. Ahora, gracias a la gestión de Vallenilla ha cambiado la también denominada audiencia. Lo triste es que no se trata de esos roles, sino de comunidad, algo que realmente nos debe interesar.
casualmente el día Lunes observé a la susodicha en el programa llamado «Tves en la noche» , en realidad no me sorprendió, he sido testigo del cambio drástico que ha sufrido la programación de lo que en antaño había sido una televisora que distaba de las imposiciones «culturales» de este sistema en decadencia. Ahora, y al igual que el resto, nos bombardean de trivialidades que en nada ayudan a construir una mejor sociedad; no hay coherencia entre el discurso que se levanta y defiende desde el oficialismo con este seudo medio de comunicación que aún uno duda de las manos en las cuales está.
Pana te la comiste. Borraste mi comentario porque incluso cuestioné tu ideología y las inconsistencias del gobierno. Así son los socialistas. Censuran lo que no quieren escuchar o leer
¿Cuál fue el comentario? no estoy acostumbrado a tantos comentarios. Suelo escribir poesía. Este trabajo es todo lo contrario. Indícame cuál fue…
No eliminé ningún comentario. Creo que no sabes llenar los requisitos para comentar. Saludos.
Como si el tema fuese el contenido de la Tv. La Tv solo busca adaptarse al discurso que quiera la mayoria y asi ha sido siempre, sobre todo si quieres que la inversion genere retornos. Si la Tv fuese educativa nadie la veria. o acaso la gente ve Vale Tv?. El tema es la calidad del contenido mental del venezolano – una mezcla de Resentimiento social, chisme, farandulerismo e ignorancia. Lo peor del mundo hispano. En este sentido RCTV hacia muuuucho mejor trabajo que Tves en todo. El chavismo prefirio desmontar algo que ya estaba operativo y funcionaba bien, a lo cual pudo haberle hecho sugerencias para incluir programas mas eductativos,… y darselo a un tipo como Valenilla que representaba de lo peor de la cultura televisiva venezolana. Nunca se les ocurrio que quien pudiese liderar un proceso asi podria ser una persona Vanesa Davies por ejemplo? Y lo peor es que teniendo los fondos para abrir otros caneles prefirieron optar por tumbarle la señal a otros y robarle las antenas en vez de construir- NO esperen belleza lo que nacio viciado.
RCTV es la representación de la televisión basura y globalizada. SU «público» se ha dejado seducir y domar por el capitalismo y sus vertientes, algo que culturalmente no podemos permitir. Precisamente TVES era la respuesta, pero las cosas cambiaron por lo que dices, un vicio acechó las «tropas chavistas» desde el comienzo.¿Por qué ConcienciaTV no es tan conocida como TVES?
Ciertas cuestiones me causan ruido, a ver, ¿se puede utilizar el término transculturación en un medio de comunicación? Si es así, agradecería que me ilustraras un poco más sobre este punto. Porque si es así (quiero creer que no) la Tves pre Vallenilla era poseedora de una cultura inestable, por no llamarla fatua ¿Qué quiero decir con esto? Una transculturación es exitosa cuando el receptor se afirma sobre una cultura con bases irregulares, pobres y sin fuerzas para combatir al ente invasor, si pasara lo contrario: veríamos aun una lucha de culturas en la pantalla. Cosa que sería un tanto rara, porque Tves no es un ente vivo o conformado por estos (por ello la dificultad de utilizar este termino acá)
Otra cuestión, si tu tesis es que Tves fue transfigurada hasta un polo opuesto completado un ciclo de cambios… Ahí sí que usas mal el concepto, seguramente te referías a la aculturación de Tves. Me explico, la transculturación es el proceso, la aculturación es el fin (que según lo que se entiende de tu artículo, ya es algo dado por hecho). Es como cuando se cae en el grave error impulsado por la ignorancia de condenar a perpetuidad al llamar una persona «sidosa» cuando en realidad solo porta el virus de VIH. Otro ejemplo: no es lo mismo dar a luz que estar embarazada.
Y quizá lo que más ruido me causa: «¿Qué más se necesita para saber que Winston Vallenilla fue inyectado por el antídoto de la transculturización?» Según entiendo, por tu línea de pensamiento la transculturación es mala y nefasta… Entonces ¿En qué mundo paralelo el antídoto de algo te condena a padecer aun más el mal del que se quiere huir? ¡Es todo lo contrario! Porque si Vallenilla fue inyectado con el antídoto de la transculturación ¡Tendríamos una Teves «bohemia» y «artística» como antaño! Y no lo que ahora criticas. Propongo unos términos que seguro son más acordes: virus, cepa, microbio, germen, enfermedad, peste…
Y sí, la Tves actual pasó a convertirse en lo mismo que toda la tv nacional: una longaniza de dietas para obesos, chismes y falsos profetas. Y la Tves pasada seguía condenando a la cultura venezolana a la vetusta y ninimia visión de reducir la riqueza cultural venezolana al campo, cuatro, arpa y maraca.
Te invito a que tomes más tiempo en leer el reportaje. Saludos.